Estudiar, concentrarte, acumular
información, procesarla para que se convierta en
conocimiento...todos conocemos esta receta cuando somos estudiantes
(en este caso, de música). Estoy convencido que tus avances en tu
formación artística se basan no en lo que sabes, si no en lo que
crees. ¿Crees que puedes ser mejor? ¿Crees que no tienes eso que
llaman talento? ¿No dejas de pensar que no sirves para la música o
que no avanzas como otros porque no tienes condiciones?
Estos rápidos
ejemplos que cito a lo mejor te acompañan a diario y posiblemente
por años. Si no crees que puedes ser mejor músico y que puedes
mejorar, entonces tu concentración, información y conocimiento te
servirán de poco porque no tendrás la convicción de ser artista,
de sentirte libre de creer que cada día puedes mejorar. Un artista
es un ser muy sensible convencido de su arte, de sus capacidades
expresivas, con mucho mundo interior que compartir y con una honesta
conexión con el alma de su arte. ¿Crees que hacer música es sólo
soplar un instrumento? Espero que no.
Cada día que salgas de tu
clase, piensa en el resultado positivo de la misma, en lo bien que te
sentiste y que rendiste de acuerdo a las exigencias de tu maestro.
Luego piensa: si soy capaz. Empieza este año 2013 creyendo (y luego
estudiando) que nada te falta para crecer día a día.
Publicado el 2 de enero del 2013. Aquí el texto original en Facebook.